¿Alguna vez has sentido que el entorno laboral en el que trabajas es hostil o insalubre? ¿Te has preguntado cómo afecta esto a tu rendimiento y compromiso con la empresa? El y la mexicana promedio pasa una media de ocho horas al día en su lugar de trabajo, por lo que resulta esencial ser conscientes de la importancia de tener un buen ambiente laboral donde, no solo se pueda permanecer todo ese tiempo, sino que también se le otorgue la oportunidad de crecer a sus contribuidores, los mantenga motivados y con un plan a futuro. Según estudios realizados por Great Place to Work, el ambiente laboral influye directamente en la productividad y el rendimiento de las y los trabajadores.
Dentro del ranking de “Los Mejores Lugares para Trabajar para Mujeres en México 2023”, se evalúan a los participantes en cinco categorías diferentes: compañerismo, orgullo, credibilidad, respeto e imparcialidad. Es importante destacar que el ranking recolecta información de miles de mujeres que ocupan diversos roles, desde puestos operativos y administrativos hasta jefas de área, cargos técnicos, gerenciales y ejecutivos. Dentro del panorama laboral actual se muestra que la representación femenina en la fuerza laboral está aumentando y esto ocurre, en su mayoría, en las empresas donde hay mejores niveles de satisfacción para las mujeres. Hay ciertos elementos clave que los detonan como: la participación en las decisiones, la conciliación de la vida laboral y familiar, los salarios y compensaciones justas, los procesos equitativos en los ascensos y el desarrollo y crecimiento profesional. Adicionalmente, y como lo comentaba Denisse Montesinos en su última entrevista de MEF, el tener un equipo de mujeres dentro de la organización, que no solo esté para cumplir una cuota de género y que esté satisfecho con sus organizaciones, le trae a las empresas muchos beneficios, mayores niveles de innovación, organización y gestión eficaz de grupos de trabajo.
Entonces, ¿cómo crear un buen entorno de trabajo y generar bienestar? Una forma que ha demostrado ser eficiente es fomentar el respeto y desarrollar relaciones sociales sanas, disponer de zonas de descanso en el entorno laboral, cuidar el espacio de trabajo y promover la cooperación dentro de la organización. Al crear un entorno de trabajo sano y agradable, no sólo se mejora el rendimiento y compromiso laboral, sino que también se contribuye a la equidad de género en el lugar de trabajo. Por lo tanto, las empresas que mejor retengan a las mujeres serán aquellas que ofrezcan un entorno de trabajo que garantice su participación en la toma de decisiones, asegure la conciliación de la vida laboral y personal, garantice la igualdad salarial con respecto a los hombres, tenga procesos de promoción transparentes y justos, y ofrezca oportunidades de desarrollo y crecimiento profesional para el talento femenino. Disponer de un buen espacio de trabajo es crucial para crear un entorno que apoye la igualdad de género y promueva la retención del talento femenino.
Muchos de los avances que se habían tenido en este ámbito se vieron dañados por la pandemia del COVID-19, debido a que las mujeres empezaron a rotar más que los hombres en los puestos directivos y fueron más las mujeres que tomaron roles en las labores del hogar. Según Great Place To Work México, la tasa de rotación entre las ejecutivas de los sectores minorista y de bienes de consumo fue del 31%, frente al 24% de los hombres; adicionalmente, el 27% de las mujeres directivas dimiten, frente al 7% de los hombres. Esto supone un obstáculo para lograr la igualdad de género en las organizaciones.
Sin embargo, aunque el camino aún es largo, se espera que cada vez haya más instituciones que se unan convencidas en este objetivo común, que estén comprometidas en generar condiciones que promuevan el desarrollo del talento femenino, así como para compartir buenas prácticas que permitan a otras organizaciones a cerrar la brecha de género.
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